Lo santos, escuchan las oraciones, de todos


Apocalipsis 5,8
Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; cada uno tenía un arpa y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos. 

Juan 10:34-35: 34 Respondióles Jesús: ¿No está escrito en vuestra ley: Yo dije, Dioses sois? 35 Si dijo, dioses, a aquellos a los cuales fue hecha palabra de Dios (y la Escritura no puede ser quebrantada); 36 ¿A quién el Padre santificó y envió al mundo, vosotros decís: Tú blasfemas, porque dije: Hijo de Dios soy?:

Juan 17:22
22 La gloria que me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno.

Efesios 4:4
Un solo Cuerpo y un solo Espíritu, como una es la esperanza a que habéis sido llamados.

Hebreos 12:23  23 a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los justos hechos perfectos,

Más claro no canta un gallo, Cristo le dio la misma gloria a los apóstoles, la misma gloria que le dio el padre.
Cristo mismo reconoce la divinidad, en los que siguen su palabra y la cumplen.
Cristo mismo dijo que somos un mismo espíritu, ¿cómo pueden dudar los hermanos separados, que una vez, llegados a la perfección, no seamos imagen y semejanza de Dios, como él lo dispuso desde la creación?...



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